TEMARIO O CURRÍCULO ACADÉMICO
¿UN SIN SENTIDO?
Encarna Romero
Hablo con profesores todos los días y me trasladan con disgusto y pesar las frustraciones que sienten a la hora de enseñar.
Unos temarios desorbitados, llenos de temas imposibles de trabajar en el tiempo establecido y con unos contenidos, en su mayoría, que poco o nada tienen que ver con la edad y los conocimientos de los estudiantes.
¿Qué está pasando? ¿Porqué tanta prisa? ¿A dónde nos lleva esto?
Me cuentan que “no pueden más”, que “deben pasar de un tema a otro sin poder trabajarlo como ellos querrían y sin saber si sus alumnos/as han entendido todos los conceptos”, o lo que es peor, “siendo conscientes en muchas ocasiones, de que la gran mayoría de ellos, no los han entendido”, pero “no hay tiempo para más explicaciones”, “debemos pasar al siguiente tema”.
Me hablan de las temidas inspecciones que tienen que pasar por parte del Ministerio donde les evalúan si han ofrecido a sus alumnos/as todo el temario, o no, y las consecuencias a nivel laboral que eso conlleva. Me explican, aunque en voz bajita, que los centros también pasan inspecciones de los resultados que a nivel global tienen los estudiantes y de las consecuencias que lleva el no presentar un informe favorable con muchos aprobados.
Reconozco que al igual que los profesores, me he perdido entre las hojas de los libros que los estudiantes me enseñan todos los días.
Como psicóloga educativa, no puedo entender para qué le sirve a un niño/a de 6 o 7 años conocer qué son las Elecciones Municipales, cómo se vota, qué son las concejalías y los concejales o quién es el alcalde. No alcanzo a comprender a qué mente privilegiada se le ha ocurrido que esto podía ser un conocimiento básico en el temario académico de un niño de esa edad, cuando además, está claro que no va a entender por mucho que le expliquen, entre otras cosas por que no le interesa en absoluto, el sentido de esas acciones o de esas Administraciones, es decir, lo único que se consigue con esto, es llenar la cabeza de los alumnos/as de conceptos carentes de interés y significado para ellos que no les van a servir de nada.
No dejo de sorprenderme cuando veo esos temarios tan largos y copiosos y que sin embargo, muchos alumnos/as no pueden entender por que a pesar de estar en Educación Secundaria no han adquirido fluidez ni comprensión lectora, por que en toda su escolarización, nadie tuvo tiempo para enseñarles a leer bien y poder así comprender un texto.
Veo cada día como deben aprender ecuaciones pero son carentes de los conocimientos básicos de matemáticas, imposible realizar sumas mentales de más de dos dígitos por que nadie les ha dado unas pautas o consejos sobre cómo hacerlo; deben saber de memoria la tabla periódica pero desconocen que es la ciencia, la física o la química; conocer miles de autores y trabajar su literatura sin entender lo que dicen los textos que leen y sin saber si una palabra se escribe con b o con v; aprender el relieve del mundo con sus ríos y montañas pero ya no recuerdan los de España por que en realidad nunca los aprendieron; memorizar decenas de verbos sin que les hayan explicado que si pertenecen a una misma conjugación, a no ser que sean irregulares, todos se conjugan de la misma forma con las mismas terminaciones...y un sin fin de cosas más.
En numerosas ocasiones los profesores me preguntan porqué los alumnos están tan “rebeldes” o porqué parece que no tengan ganas de aprender y mi respuesta siempre es la misma: -”Ponte en su lugar”-, -“Piensa cómo estás tú”-, -“Piensa en las frustraciones que sientes, aun siendo adulto, por culpa del sistema educativo que tienes que llevar a cabo y ahora traslada eso a una mente infantil, joven o adolescente en un cuerpo lleno de hormonas y tendrás como resultado un alumno/a frustrado pero además, impotente por la edad que tiene que le llevará a un profundo cabreo”-.
Los estudiantes pasan de un tema a otro sin enterarse de mucho, pero además, pasan de un curso a otro sin haber adquirido los conocimientos necesarios, por que ahora está mal visto, incluso, prohibido por Ley, que los niños/as puedan repetir. Pero después, cuando en el curso al que han pasado, no alcanzan, lógicamente, los objetivos propuestos, se les cataloga de “retraso académico” y se les envía a un profesor de apoyo, lo que han denominado “PT”, donde las aulas están tan llenas y estos profesores tan desbordados, que ya no se puede enviar a ninguno alumno/a más; parece ser que empieza a haber tantos niños/as en las aulas de apoyo como en las del propio curso.
No se puede dedicar el tiempo necesario a un alumno para que aprenda los contenidos marcados pero, a pesar de ello se le sube de curso y cuando está allí se le dice que ya debería saberlos por la edad que tiene, pero como, claro está no los sabe, se le envía a un aula de apoyo abandonando su clase y a sus amigos y soportando, de vez en cuando, que alguno le diga que allí sólo van los “tontos”, (algo de lo que soy consciente por que ellos mismos me lo cuentan). Esto, ocurriendo una y otra vez, ofrece como resultado niños/as llenos de profundas frustraciones, angustia, dolor y en ocasiones, fuertes depresiones. Estudiantes que van a odiar la escuela y que como no pueden abandonar, al llegar a secundaria con esos sentimientos y teniendo como única forma de mostrarlos su comportamiento, por que cuando quieren hablar lo normal es que nadie les escuche, son clasificados como “rebeldes” o como he escuchado en alguna ocasión, “irrecuperables”.
¿Quién tiene la culpa de toda esta situación?:
¿Los profesores que deben hacer lo que les mandan, en un escaso tiempo y con pocos recursos? ¿Los alumnos que recogen lo poco que reciben y de eso deben extraer lo que no se les ha ofrecido? O ¿Un Sistema Educativo que no funciona, con un temario realizado por personas que poco o nada tienen que ver con la educación, sin consultar a quienes realmente saben de eso?
Creo que la respuesta está clara. Lo que no acabo de entender es el porqué. ¿Cuál es la pretensión de los gobernantes? ¿Qué quieren conseguir con ello?
¿Quizás tenga que ver con un intento por parte del Gobierno de que los jóvenes abandonen los estudios al terminar la enseñanza obligatoria, cansados o aborrecidos y así, poder rebajar el alumnado en las universidades que salen tan caras? ¿Quizás por que de este forma podrán ahorrarse miles de euros en becas? ¿Quizás por que si eso ocurre tendrán más trabajadores en las fábricas sin estudios a quienes poder controlar mejor? ¿Quizás por que cuanto antes se deje de estudiar y más inculto sea el pueblo más fácil será de dominar?
En mi opinión creo que no estoy demasiado desencaminada si respondo a todas esas preguntas con una respuesta afirmativa.
¿Qué opináis vosotros/as?
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